Virginia Gamba, de Argentina, es la Representante Especial del Secretario General para Niños y Conflictos Armados. Fue nombrada por el Secretario General Antonio Guterres en abril de 2017 y es la cuarta persona en ocupar este puesto.
Mirando hacia atrás a la creación y evolución del mandato de niños y conflictos armados
A principios de la década de 1990, las Naciones Unidas intentaron llamar más la atención internacional sobre la difícil situación de los niños afectados por el conflicto armado.
En diciembre de 1993, siguiendo una recomendación del Comité de los Derechos del Niño, la Asamblea General de las Naciones Unidas expresó su preocupación «por el grave deterioro de la situación de los niños en muchas partes del mundo como resultado de los conflictos armados», y preguntó al Secretario General que nombre a un experto para que realice un estudio exhaustivo sobre el impacto del conflicto en los niños, incluida su participación en las guerras como niños soldados.
Graça Machel, la primera Ministra de Educación de post-independencia de Mozambique, y defensora de los derechos de los niños, fue nombrada para emprender este proyecto masivo.
Informe Graça Machel
Durante dos años, Graça Machel viajó a varios países afectados por conflictos y se reunió con niños, familias, trabajadores humanitarios, funcionarios del gobierno y con cualquier persona que pudiera ayudarla a comprender mejor lo que niños y niñas estaban experimentando.
Su informe, «Impacto del conflicto armado en los niños», presentado en 1996 a la Asamblea General, describió la brutalidad a la que millones de niños atrapados en conflictos estuvieron expuestos y demostró la importancia de esta cuestión para los derechos humanos internacionales, el desarrollo y la paz y agendas de seguridad.
Nace un nuevo mandato de la ONU
El 12 de diciembre de 1996, cuatro meses después de la publicación del informe Machel, con la aprobación de la resolución 51/77, la Asamblea General recomendó el nombramiento de un Representante Especial del Secretario General para los niños y los conflictos armados. El mandato nació. La comunidad internacional ha trabajado para que la protección de los niños afectados por la guerra sea la atención que merece y ahora ha creado un punto focal de acción para reforzar la protección mundial de la infancia.